Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
El tema más importante de la campaña de Lucy Meza por la gubernatura de Morelos es la seguridad ciudadana. Casi no hay otro. Por eso, como candidata de la coalición PAN, PRI y PRD hizo un planteamiento a Santiago Taboada, abanderado de esa misma alianza a la Jefatura de Gobierno: exportar a esa entidad el modelo “Blindar BJ”, cuyo resultado, según el INEGI, fue haber llevado a la Alcaldía Benito Juárez a registrar el más bajo índice de percepción de inseguridad de todo el país.
Ese modelo de seguridad es urgente en Morelos, plantea Lucy Meza en sus recorridos de campaña, porque con la actual administración morenista, la del futbolista Cuauhtémoc Blanco –que hoy tiene una muy magra aprobación del 6%–, prácticamente desbarató la policía estatal. De tener 3 mil 500 elementos en 2018, ahora son solamente mil efectivos para una población de 2 millones de habitantes. También le bajaron el switch al sistema de videovigilancia de la entidad, llamado C5, y acabaron con el área de inteligencia de la policía estatal. La candidata opositora trae un fuerte dispositivo de seguridad federal para hacer campaña.
Este modelo de “Blindar BJ” que hoy tiene 300 elementos y 70 patrullas ha sido retomado por otras Alcaldías de la capital del país con buenos resultados: Álvaro Obregón, Coyoacán (Escudo), La Magdalena Contreras, Miguel Hidalgo. En todos los casos, los alcaldes de esas demarcaciones han logrado niveles altos de aprobación porque redujeron considerablemente los índices delincuenciales. Otras demarcaciones como Azcapotzalco o Tlalpan, cuyos recursos presupuestarios no les alcanzaron para un plan de ese tamaño, también lograron avances, tan sólo con voluntad política.
Aunque habrá quien se pregunte por qué Lucy Meza se enfoca tanto este tema y menos en el desarrollo económico, en la productividad de la entidad, la razón es contundente: es tan grande el problema de inseguridad en Morelos, que los empresarios le han ofrecido que si ella se dedica a darles seguridad, ellos se van a encargar de que la economía de la entidad florezca de nuevo.
El problema que más le reportan a Lucy Meza son los secuestros exprés, en muchos casos de ejidatarios, a quienes liberan por 20 mil o 30 mil pesos. También cobros de piso de hasta 50 mil, como ocurre en la central de abasto de Cuautla, la segunda más grande del país, donde han cerrado muchos negocios por la extorsión.
Lucy Meza dice en sus reuniones y recorridos de campaña que en Morelos se acabó la vida nocturna, ya ni en Cuernavaca, donde antes tanto chilango iba los fines de semana a divertirse, incluso en alguna época porque allá era más seguro que la CDMX. Hoy, en aquella entidad existe una especie de “toque de queda” de facto, pues a las 9 de la noche la gente se mete a sus casas y ya no sale.
El plan “Blindar” de Lucy Meza no es sólo para Morelos. Ella ha planteado que vaya mucho más allá: un corredor blindado desde Morelos hasta Veracruz, pasando por el Estado de México, la Ciudad de México y Puebla. Pareciera haber condiciones políticas para ello: Lucy Meza fue compañera en el Senado de Delfina Gómez, gobernadora del Edomex; en la CDMX todo apunta a que gane Santiago Taboada, y en Veracruz también el candidato de la oposición PAN, PRI y PRD, José Yunes. En Puebla, si gana Alejandro Armenta, fue también su compañero en el Senado, y si gana el panista Eduardo Rivera, es de la coalición. Lo veremos.